National Rogergraphic: Egipto

Corría el año 2003 cuando tres intrépidos aventureros (Marisa, Mikel y el que suscribe) planearon ir a Egipto. Después de mucho tiempo planificando el viaje, buscando los mejores días, viendo hoteles, recorridos, precios y ya casi a la hora de ir a hacer las reservas le dio a EEUU el aberrunto de invadir Irak. Dudamos entonces sobre la conveniencia del viaje dada esta tesitura, pero ¡qué diablos! llevábamos demasiado tiempo preparando el viaje y habíamos hecho muchos esfuerzos como para que EEUU nos lo fuera a chafar todo. Total, que nos fuimos a hacer las reservas. Menos mal que no nos arrepentimos a última hora por la guerra, pues ha sido hasta el momento uno mis mejores viajes. Es muy difícil que salga todo tan perfecto en un viaje. Me lo pasé muy bien con Mikel y Marisa. Nos tocó un guía Ahmed que hablaba perfectamente castellano, bastante culto, nos explicaba todo muy bien y se desvivía por cualquier cosa que le pedíamos. El grupo de españoles que nos juntamos también era muy agradable y pasábamos buenas veladas en el barco remontando el Nilo. Y por supuesto, ni que decir tiene, quedé maravillado por la riqueza arqueológica del país. Por momentos pensé estar sufriendo el síndrome de Steindal. Las pirámides, los templos (Abu Simbel, Edfú, Esna, File, Kom Ombo), las tumbas de los faraones, las gentes, los mercadillos, los olores a especias, el Nilo, los bailes, la comida, el museo de El Cairo (la mayoría de las piezas de este museo serían el centro de la sala más importante de cualquier museo occidental y ellos las tiene allí un poco amontonadas como si no fueran importantes, tanta es la cantidad y calidad de objetos que tienen), el pitido de los coches (El Cairo es una ciudad absolutamente caótica en ese sentido.) Nos pasó de todo, sufrimos una tormenta de arena del desierto e incluso nos llovió en El Cairo cosa que se produce muy rara vez y por supuesto estando allí EEUU invadió Irak con lo que hubo un poco de revuelo en las embajadas. Lo mejor fue la compañía y el crucero por en Nilo visitando templos, sin olvidar las Pirámides y Abu Symbel. Lo peor que se acaba pronto. No pasa nada, siempre se puede volver, además el mar Rojo es uno de los mejores sitios del mundo para bucear o sea que habrá que darse otra vueltecita por allí. Aquí os pongo unas fotos del viaje para que os animéis a ir y he subido unas cuantas a Flicrk por si os apetece verlas. El mérito de la mayoría de las fotos es de Mikel y Marisa pues aunque yo también tiré bastantes me dedicaba más a la cámara de video.

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